Hola de nuevo, aquí tu asesora sobre psicología de la inversión.
Afinar el instrumento
Ya te anticipé en la pasada Newsletter que hemos de empezar a poder parar la mente. Antes de empezar a trabajar hay que afinar el instrumento, como haría un buen músico. ¿No querrías talar árboles con un hacha sin filo, no? Pues tu cerebro es tu principal herramienta y has de tenerla siempre a punto. Y ya te digo que no es un capricho mío, ni que me haya metido en un grupo de apasionados de la meditación o del budismo zen (música de campanillas). Sí, he practicado y aún practico (algo menos de lo que debería) Mindfulness. Y es una disciplina que nos proporciona muchos beneficios. Pero antes de entrar en eso (que no creo que sea hoy) quiero hablarte de cómo funciona tu cerebro. Y de que puedes empezar haciendo algo terriblemente simple en apariencia pero que va a darte un resultado sorprendente.
Modos de funcionamiento cerebral
El cerebro tiene varios modos de funcionamiento, pero para simplificar diremos que los básicos son, estar despierto o dormido. Ríete un poco, sí, un montón de años estudiando psicología para ser ahora el Capitán Obvio. Pero sigamos. Una vez despierto, también lo vamos a simplificar en dos modos: cuando estamos centrados en una actividad o resolviendo un problema y cuando no estamos haciendo nada en concreto o dejamos divagar la mente. Lo que diríamos en modo llano, pajarear.
Y ahora una pregunta: ¿Cuándo gasta el cerebro más energía, en el modo actividad o en el de divagar? Ya te imaginas que es una pregunta con trampa. Lo habrás adivinado, gastamos más energía cuando estamos en el modo divagar. ¿Por qué sucede eso? Porque para decirlo de un modo técnico está activa la Red neuronal por defecto, o red de modo por defecto. Y aunque todavía no se sabe lo que puede llegar a hacer esa red neuronal, porque se calcula que gasta entre el 60 y el 70% de la energía cerebral, te aseguro que su papel es primordial para muchas cosas. Organizar recuerdos, realizar proyecciones futuras, generar nuevas ideas, etc. Lo que te puedo garantizar es que es en el lugar en dónde se conectan las ideas, surge la inspiración y la creatividad. So varios los lóbulos cerebrales que participan y la energía que se despliega ahí es impresionante.
Cuándo se conecta la Red por defecto
¿Recuerdas el famoso ¡Eureka! de Arquímedes cuando descubrió el Principio que lleva su nombre mientras se estaba bañando? Sí, bañando. Llevaba días dándole vuelta al problema y no encontraba la respuesta. Cuanta la leyenda que corrió desnudo por las calles de Siracusa de la alegría que tuvo. Espero que no se te ocurra correr desnudo por la calle cuando tengas tu próxima buena idea. O si. Si lo haces graba un vídeo ;). Quizás no te suene tanto, pero Michael Faraday que descubrió la estructura anular de la molécula del benceno lo hizo en un momento de ensoñación, se dice que delante de la chimenea, en la que se le apareció una serpiente que se mordía la cola.
Si has visto alguna serie inspirada en Sherlock Holmes,, como Holmes, Elementary o incluso el Dr. House te habrás fijado que todos los episodios tiene la misma estructura. Primero recopilan los datos, se dan varios errores y entonces en un momento fortuito, todos esos daos se unen y el protagonista da con la clave que estaba buscando.
Te cito algunos momentos en que tal vez a ti te ha sucedido eso. Estabas dándole vueltas a algo y no encontrabas la solución. Lo has dejado de lado y entonces:
Has ido a dar un paseo
Te has ido a prepararte un café
Te has ido a la ducha
Estabas mirando por la ventana
Estabas conduciendo
otras opciones del estilo…
Y la solución ha venido sola como por arte de magia. No es magia, como ya te he explicado, es la red neuronal por defecto haciendo lo que mejor sabe hacer. Conectar ideas. Por eso pasear te da dinero. O cualquier otra actividad en que dejes a la mente divagar a sus anchas. Porque permite que las ideas se organicen y surjan las mejores soluciones.
Cuándo hay que cambiar de modo y cómo hacerlo
¿Cómo saber cuándo es el momento de parar? Porque es posible que ahora estés pensando, muy bien Mertxe, pero no voy a pasarme el día pajareando. Ya te he dicho, como Sherlock, que la primera fase es la recogida de datos. Tus gráficas, el análisis de la empresa, el análisis macroeconómico o lo que sea que estés haciendo en ese momento. Tal vez el estudio de posibles destinos vacacionales. ya has hecho toda esa fase y no acabas de dar con la solución. Te sientes atascado y que no se te ocurre nada más. O ves que lo estás haciendo todo de un modo mucho más lento del habitual. Y como dicen, doblo la apuesta y las veo. O ya tienes una “solución” o idea. Bien! Ahora toca dejarla en reposo.
Y ahora empiezas a a hacer una de esas cosas de las que hemos hablado: irte a dar un paseo, mirar por una ventana, etc. Es importante que cumpla varios requisitos:
Moverse físicamente del lugar en el que estás
Poner atención a elementos ambientales, si son naturales mejor
Date cuenta también de sensaciones físicas: qué ves, qué oyes, que hueles…
Desconecta de móviles y demás gadgets
La música y el baile están permitidos (si bailas, grábate y envíamelo, please)
Y deja de pensar en nada en concreto
Y permite que el cerebro haga su magia. No te puedo asegurar que te venga la idea en ese mismo instante, pero sí que estarás mejor preparado para que lo haga.
Todo este proceso se puede entrenar y cada vez resulta más sencillo ponerse en ese estado de “pajareo creativo”. aquí te he dado las primeras pautas pero ya sabes que el cielo es el límite. Y sí, el tema del mindfulness como ya anticipé al principio, queda para la próxima.
Me despido aquí y no olvides que todo esto va de que mejores tu economía y de que el dinero sea un medio y no un fin en sí mismo, un medio para tener la vida que deseas.
Versión en vídeo
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Mertxe Pasamontes
Psicóloga de Wall Street
Que bueno! En programación pasa algo idéntico e intuitivamente casi todos descubrimos como el paseo, el café o la charla informal con alguien, desbloquea muchas veces errores que éramos incapaces de ver. Estupendo post. Lo compartiré con mis alumnos.
Soy diseñador textil y tarde muchos años en descubir que cuando no salen las cosas, cuando te cuesta sacar adelante el proyecto, es momento de parar y dar un paseo y dejar que la solución aparezca sola. Ojalá me lo hubieran explicado antes.
Ahora ya entiendo el por qué y sé, gracias a ti, mejor como hacerlo. un saludo